El colaborador académico del Departamento de Operaciones e Innovación y Data Sciences en Esade, te explica por qué desplegar el potencial de estas habilidades puede empoderarte para prosperar en un ámbito digital en constante evolución.
En el actual entorno digital, es esencial, tanto para los individuos como para las empresas, desarrollar una mentalidad digital. La capacidad de moverse y de hacer un uso eficaz de las tecnologías digitales puede proporcionar una ventaja competitiva, fomentar la innovación e impulsar el crecimiento. En este análisis sobre la mentalidad digital, profundizo en cuatro habilidades básicas: la conciencia digital, la visión a largo plazo, el aprendizaje activo y la capacidad de influencia.
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Estas habilidades tienen una enorme importancia a la hora de empoderar a los individuos para que puedan prosperar en la era digital. Además, se debe insistir en la necesidad de tener paciencia y concentración, es decir, en la perseverancia como actitud que se mantiene a lo largo del tiempo.
CONCIENCIA DIGITAL
La conciencia digital es la base de la mentalidad contemporánea, encarnando la experiencia atemporal que allana el camino para la revolución digital. Supone la adquisición de conocimientos e ideas esenciales previo a la utilización de instrumentos digitales, plataformas y redes para conocer las enigmáticas operaciones que se producen en nosotros y en nuestro entorno.
Un individuo digitalmente consciente tiene la habilidad de formular las preguntas pertinentes y, a continuación, de dominar el arte de emplear la tecnología en beneficio propio. Al estar al día de los conceptos fundamentales y de las tendencias incipientes, puede discernir las posibilidades de aprovechar la tecnología y sacar partido de su potencial para progresar a nivel personal y profesional. Esta conciencia otorga a las personas el poder de ser relevantes en el ámbito digital, siempre cambiante.
VISIÓN DIGITAL
La visión digital es la habilidad de pensar estratégicamente y de forma creativa sobre cómo aprovechar las tecnologías digitales para promover soluciones innovadoras y de impacto. Tener una mentalidad visionaria es esencial per aquellas personas que pretenden introducir elementos de disrupción en los sectores tradicionales, impulsar el cambio transformador y aprovechar las nuevas oportunidades que se presentan.
A través de la identificación astuta de las tecnologías florecientes y la utilización imaginativa de ellas para abordar los complejos desafíos de la vida real, las personas tienen el poder de descubrir oportunidades desconocidas y situarse en la vanguardia de sus respectivos campos. Quienes tienen capacidad visionaria digital rechazan quedar limitados por las normas existentes, y optan por avanzar, movidos por sus conocimientos innovadores, para moldear y configurar un futuro que solo les pertenezca a ellos.

APRENDIZAJE ACTIVO
Para promover el crecimiento continuo en la era digital, es esencial tener la capacidad de aprendizaje activo con el fin de mantenerse en la cresta de la ola. Las personas que aprenden de forma activa son individuos autodirigidos y motivados, que comprenden la importancia del aprendizaje continuo en el contexto digital. Buscan activamente nuevos conocimientos, habilidades e ideas, utilizando para ello varios recursos, como los cursos online, las comunidades y las plataformas de networking.
Adoptando una actitud abierta al crecimiento y mejorando sistemáticamente sus competencias digitales, las personas que aprenden activamente tienen la capacidad de adaptación y la agilidad que requiere un entorno digital que cambia constantemente. Están preparadas para abordar nuevos retos y aprovechar las oportunidades que se les presentan.
CAPACIDAD DE INFLUENCIA
Establecer relaciones de éxito como influencer en el mundo digital va más allá de la popularidad en las redes sociales. Implica principalmente la habilidad social de tomar la iniciativa y enfrentarse a un posible rechazo al entablar y mantener relaciones profesionales con fines personales y comerciales.
Los influencers se muestran persistentes porque conocen la importancia del networking y promueven con él la colaboración mutua. En función del enfoque que prefieran adoptar, pueden utilizar distintas redes sociales para conectar con sus iguales, con mentores, con expertos del sector y con potenciales clientes.
A modo ilustrativo, yo solo utilizo LinkedIn con fines profesionales, y me abstengo de utilizar Facebook, Instagram, Twitter, TikTok e incluso WhatsApp, porque prefiero Telegram en los países occidentales, Signal por razones de seguridad, Line en el Japón y Kakaotalk en Corea para comunicarme. Utilizo ampliamente el hecho de cocinar como medio para conectar con personas, hasta el punto de invitarlos a mi casa y, literalmente, cocinar juntos.
En general, alimentando unas relaciones significativas y fomentando una presencia positiva tanto offline como online, los influencers pueden reforzar su marca personal y desbloquear nuevas oportunidades. La capacidad de influencia efectiva permite a los individuos moverse por las redes digitales, establecer alianzas estratégicas e impulsar el crecimiento mutuo y el éxito.
HABILIDADES PARA UN MUNDO DIGITAL
En el mundo actual tan digitalizado, es esencial que las personas y las empresas desarrollen una mentalidad digital si quieren prosperar. Las cuatro habilidades descritas —consciencia, visión, aprendizaje activo y capacidad de influencia— juegan un papel clave en este sentido, facilitando que las personas puedan aprovechar la tecnología de forma eficaz, innovar, adaptarse y construir relaciones de éxito.
Cultivando y desarrollando continuamente estas habilidades, lo cual exige un tiempo considerable y perseverancia, las personas pueden dar rienda suelta a sus capacidades y ser pioneras en el mundo digital, siempre tan cambiante. Adoptar una mentalidad digital no es una mera elección; es una necesidad para seguir siendo relevantes y tener éxito a largo plazo en la era digital.